En Colombia están luchando por impedir que la minería contamine su principal fuente de agua

Más de 20.000 personas se han unido para proteger el páramo de Pisba.


El páramo de Pisba en la localidad de Boyacá en Colombia, alberga una de las fuentes hídricas más importantes de la región que abastece de agua a alrededor de 10 mil personas en el departamento de Boyacá y Casanare, pero hoy este importante ecosistema está siendo amenazado por la industria minera. Mientras la empresa de capital extranjero, Hunza Coal, ha obtenido las licencias para la explotación de 700.000 toneladas de carbón anuales en la zona, la empresa Acerías Paz del Río, de la multinacional Vottorantim, pretende reabrir la mina que cerró en 2002 en El Pedregal de Tasco, en pleno sub páramo de Pisba, para la explotación de hierro a cielo abierto.

Cuando la mina en el sub páramo estaba activa, los habitantes locales pudieron ver los estragos que la actividad minera causó en el entorno natural, donde una de las quebradas se desvió y la montaña se desestabilizó, produciendo grietas profundas que pusieron en riesgo a los habitantes locales por un posible desplazamiento de terreno. Luis Carlos Ochoa, líder de la comunidad y concejal del municipio señaló además que “con la intervención de Acerías Paz de Río hace algunos años, se perdieron unos 30 nacimientos de agua en el sector, se desvió una quebrada, hubo unos problemas de inestabilidad y erosión del terreno afectando más de 30 familias de la vereda Ormesaque (…) Lo más grave es que dejaron un pasivo ambiental (un sitio contaminado por la liberación de materiales y residuos peligrosos) en todo el entorno de la mina, luego de 60 años de asentamiento de la empresa minera”.

Esto se suma a que en junio de 2014 el presidente Juan Manuel Santos firmó un acta donde decía que garantizaría la protección de los páramos –que abastecen el 70% del agua consumida en el país– y prohibiría las actividades de extracción de minerales en estos ecosistemas en el próximo Plan Nacional de Desarrollo, sin embargo en el plan presentado para el período 2014-2018, se demuestra que las empresas mineras ahora tienen vía libre para extraer minerales.

Es por esto que los ciudadanos de Boyacá, con la ayuda de la organización Greenpeace, hoy están defendiendo los páramos de la región y denunciando las supuestas irregularidades que rondan la aprobación de explotación de recursos aprobada en un tiempo récord de 2 meses, de Hunza Coal. Bajo la campaña “Aduéñate del Páramo de Pisba”, incitan a las personas a adueñarse simbólicamente de su agua, de su flora y su fauna para protegerlos y defenderlos como si fueran suyos y ya cuentan con el apoyo de más de 20.000 personas que han firmado la petición.

El actor Nicolás Montero, “embajador de los Páramos”, es quien aparece en el video de la campaña llamando a las personas a que unan fuerzas para proteger estos importantes ecosistemas.